GENTE QUE TIENE HISTORIA
Morir en un escenario…
Cuarenta años sin tocar es mucho tiempo para alguien que siente que la música es parte de su vida. El guitarrista Mario Rubio sufrió un accidente que le impidió tocar la guitarra durante meses; tantos, que cuando se recuperó decidió abandonar los escenarios.
Pasaron cuarenta años, y hoy Mario Rubio es encargado de una automotora; pero un músico nunca deja de serlo por más tiempo que pase inactivo, por eso hoy está de vuelta con el grupo Viejo Smoking, que él armó y en el que parece haber encontrado todo lo que había perdido.

¿Cuál fue la razón para volver a tocar?
-Un músico amigo fue a verme a la automotora y me invitó a hacer algunas grabaciones. Yo no acepté, pero esa invitación me despertó eso que siempre quedó pendiente en mí, que era volver a tocar... Y bueno, a los pocos días me encontré con otro músico amigo, y de una charla súper informal surgió la idea de juntarnos a tocar algo... A Aníbal Piedrabuena le gustó la idea, entonces comenzamos charlas más serias… Llamamos a William De Carlo, y esa misma noche tocamos algunas cosas… Ya éramos tres: guitarra, teclado y batería… Faltaba el bajo, y me acordé de un amigo, José Copello, que me había dicho que hacía como 20 años que había tocado el bajo en Argentina. Fuimos a hablar con él... y al otro día ya estábamos ensayando!… Después se nos unieron Ángel Búa y Nelson Blanchet.
En ese entonces tenías solo una guitarra pero ni un simple amplificador. Ahora estás muy bien equipado.
-Sí, es así, yo tenía sólo una guitarra, no tenía más nada… Es que, aparte de la música, yo tengo pasión por las guitarras. Me había comprado una Godin, porque mi sueño era tener una, y pensaba comprar un amplificador, pero como no tenía ocasiones de tocar y compartir con algún otro músico, nunca compré el equipo. Cuando surgió lo de Viejo Smoking la guitarra Godin no me servía para el estilo del grupo, entonces la vendí y busqué por cielo y tierra hasta que encontré lo que buscaba: una Fender Telecaster como la que había tenido cuando tocaba. Y después me equipé, y bastante bien, sé que lo que tengo es bueno.
¿Cuánto tiempo estuviste inactivo?
-Sin tocar estuve cuarenta años, o más… Pero te cuento, nunca dejé de escuchar música y mirar instrumentos… Cuando iba a Montevideo me metía en las casas de música para mirar las guitarras y los equipos, y me moría de ganas de comprarlos, pero en aquella época era muy difícil para mí… Pero se me dio, tardó pero se me dio, y hoy lo disfruto… En realidad me considero un afortunado.

Mario Rubio jovencito en su época
en Baldosa Floja.
¿Cómo fueron tus comienzos?
-Yo me crié en el campo, en Flores. Después, con once años, vine a Sarandí Grande a vivir en una pensión, con intenciones de hacer secundaria. En esa pensión estaba Cacho Labandera, que había venido de Tacuarembó y ya cantaba temas folclóricos. Ahí nos hicimos amigos, compartimos un largo tiempo, y empecé a estudiar guitarra con él. Terminamos formando un grupo que se llamaba Los Wilkis, que estaba integrado por José Moreira, Teresita Ferrari -su esposa-, Wilmar Silva era el batero, el bajo Eduardo Moreira y yo la guitarra. Cacho cantaba… Yo era muy chico, pero ese fue mi primer grupo… Después me vine a Florida, y aquí encontré otras posibilidades. Me incorporé al grupo Los Duendes, que fue mi primer grupo en Florida. Después anduve por varios grupos más.
Creo que una de tus mayores virtudes es haber sido fundador de varios grupos importantes en Florida
-Más que una virtud era una necesidad… Yo vivía de eso, de tocar, y no tenía a mis padres acá, entonces me tenía que defender como fuera… En base a eso hice algunos “inventos” con músicos de acá…
Esos inventos ¿fueron grupos que fundaste?
-Cuando vine de Sarandí integré Los Duendes… Jorge Cortés, el batero, que era hermano del Bicho, el que fue batero de Baldosa Floja, fue a buscarme. Yo no lo fundé, Los Duendes ya estaba armado. Con Los Duendes anduvimos bien, trabajábamos bastante… Después tuve un pasaje por un grupo de rock que no duró mucho porque ya estaba en sus
etapas finales, y que se llamaba Farmacia de Turno… Más adelante vino Baldosa Floja, luego Sol Naciente, y volví a Baldosa Floja… En realidad ser el fundador, tener la idea y moverme para conseguir el resto de los músicos, lo fui de Baldosa Floja y Sol Naciente, de esos dos grupos sí me siento fundador.

Y ahora de Viejo Smoking…
… Sí, Viejo Smoking… El haber estado tanto tiempo sin tocar me llevó a empujar un poco más el carro, con ganas, intentando convencer a los demás para unirnos y hacer algo que no es muy fácil de lograr… Sí, se puede decir que soy el fundador de Viejo Smoking.
-Lo que sí hice porque siempre me gustó, fue ponerle nombres a los grupos… A Baldosa Floja le puse yo el nombre, a Sol Naciente también, y también a Viejo Smoking…
Qué extraño nombre Baldosa Floja para un conjunto de música beat, hay un tango con ese nombre…
-El nombre surgió un día de lluvia… Yo iba a un ensayo y sin darme cuenta pisé varias baldosas flojas de la vereda, salpicando barro y embarrándome el pantalón que llevaba puesto. Entré a la casa todo sucio, empapado por la lluvia y con tremenda calentura con las baldosas flojas de la vereda. Y bromeando con eso surgió el nombre de Baldosa Floja para el grupo.
Fuiste fundador, pero tengo oídas de que eras medio bandido en
aquellos tiempos y que por eso saliste de varios grupos…
-No, no, no era así… Eso es una historia que se agrandó, pero no
fue en varios grupos, pasó una sola vez. Por inmadurez, informalidad
o ponele el nombre que quieras, no fui a tocar una noche en una
actuación de Baldosa Floja y no avisé que no iría. Por supuesto que
eso me costó la inmediata expulsión, bien merecida por otra parte.
Pero fue esa única vez, yo era bastante serio y responsable con los
ensayos y las actuaciones, fue esa noche que tuve un desliz de mal
gusto y que me costó caro, fue horrible mi actitud… Hasta el día de
hoy me arrepiento.
Después tuviste un accidente y debiste dejar de tocar, no?
-Sí, cuando volví a Baldosa después de un pasaje por Sol Naciente,
sufrí un accidente en moto y tuve fractura expuesta en un brazo.
Estuve seis meses sin poder tocar la guitarra, y ese fue mi final,
nunca más volví a integrar un grupo…
¿Cuál fue el grupo más importante en el que tocaste?
-Más allá de lo musical, porque creo que musicalmente no soy yo el
indicado para hacer un juicio de lo que hicimos, el grupo más
importante para mí fue Baldosa Floja… Fue un grupo en el que me
sentía muy a gusto porque éramos todos muy amigos, teníamos más
o menos la misma edad, hacíamos la música que nos gustaba -y
creo que la hacíamos bien-, y la amistad la hemos mantenido hasta
ahora, eso es lo más importante…
¿Y Viejo Smoking? ¿Qué significa para vos?
-Viejo moking es para mí como un premio que me dio la vida sin
esperarlo…Y por varios motivos: por volver a tocar; por tocar temas de Los Iracundos, que yo creía que nunca más los escucharía alguien; por hacerlo con los instrumentos ideales para ese género. Yo felizmente tengo la misma guitarra y el mismo equipo que usaba Leoni (el primer guitarra de los Iracundos). Y por hacer esta música con gente grande, con la que hemos logrado vínculos hermosos, y poder tocar con Ángel (el cantante) con el que somos primos hermanos y nunca habíamos estado juntos en un grupo. Yo creo que Viejo Smoking llegó justo en el momento en que yo lo necesitaba.
Viejo Smoking es seguramente uno de los mejores grupos que han surgido en Florida, por sonido, profesionalismo, seriedad... ¿Pensás igual?
-Mmmm, no sé si tanto, quizás sea una apreciación muy generosa. Nosotros hacemos lo posible para sonar bien. Hemos invertido mucho en instrumentos, en equipos, le dedicamos mucho tiempo a los ensayos, con mucha responsabilidad, estamos todos compenetrados en ese asunto. El grupo está integrado con gente que musicalmente tiene mucha experiencia, como William De Carlo, Ángel Búa, Nelson Blachet… Ahora tenemos en la batería a Alejandro Cortés, el hijo del Bicho, Horacio, el que tocaba en Baldosa Floja… Al principio escucharlo fue para mí una emoción bárbara, porque tiene un estilo muy similar al padre… No sé si somos de los mejores, pero me gusta, me gusta lo que hacemos. Escucho las grabaciones y realmente quedo muy conforme…
¿Hasta cuándo vas a seguir tocando?
-Mientras esté en condiciones físicas y los compañeros me acompañen yo pienso seguir… No estaría mal morir arriba de un escenario…
Mario Rubio en la actualidad.
Indicá que te gusta Los Años Locos